Tras las navidades llega la temida cuesta de enero en la que toca apretarse el cinturón tras gastos, muchas veces excesivos, de las fiestas, pero también es el momento de las rebajas, una época para adquirir esos caprichos que en otros momentos cuestan más pero que ahora nos podemos permitir, o simplemente es un momento en el que el dinero nos cunde más, es decir podemos adquirir más productos por menos dinero. El pasado año el gasto medio por consumidor durante las rebajas de navidad fue de 326€, según indica el Observatorio Cetelem. 

Pero no hay que olvidar que lo importante es no sobrepasar un límite en el que terminemos perjudicados, y para ello, lo mejor es seguir una serie de consejos con el fin de no perder la cabeza con las rebajas y poder recuperar nuestra economía tras la Navidad: 

Presupuesto. Para no gastar por encima de nuestras posibilidades es recomendable establecer un presupuesto en el que estudiaremos cuánto podemos gastar en base a nuestros ahorros marcados, ingresos y gastos, así como la liquidación de deudas en caso de que tengamos. De esta forma, y siempre y cuando nos ciñamos a él, seremos capaces de irnos de rebajas y ahorrar en plena cuesta de enero. 

Investiga el mercado antes de que empiecen las rebajas. Para ahorrar, es imprescindible tener claro lo que necesitamos, y a su vez, realizar una búsqueda en las tiendas antes de que empiecen las rebajas; de esta manera, sabremos el precio real, el descuento y dónde encontrarlo. En muchas ocasiones las marcas ponen porcentajes más altos de descuento de lo que realmente son, por eso, es importante el estudio previo y analizar si realmente nos compensa adquirirlo en ese momento. 

Revisa qué tienes y por qué quieres un producto antes de comprarlo. Muchas veces no somos conscientes de qué tenemos en casa, y vemos un producto rebajado y nos cegamos, pero es posible que tengamos algo parecido y no lo recordemos, o incluso que en realidad no nos aporte ningún valor, por ello es importante revisar si ya disponemos de algo similar y cuál es el uso real que le vamos a dar a la nueva adquisición, y solo comprarlo en caso de que sea necesario. 

Aprovecha el momento de mayor descuento. Los mejores descuentos son al final de las rebajas, en lo últimos días se encuentran los precios más bajos, no obstante, en ese momento hay menos variedad de artículos. La mejor técnica sería comprar aquellas cosas de las que estas seguro al principio, antes de que se agoten y aprovechar el último momento para ver si hay algo de lo que queda que encaje con tus necesidades. 

Focaliza. En las tiendas suelen aprovechar para colocar los productos de nueva temporada estratégicamente para que llamen la atención, pero si realmente queremos ahorrar es mejor que acudamos directamente a la zona de descuentos y no nos dejemos llevar por los impulsos. 

Compara online. Hay algunos artículos de venta electrónica que pueden variar de precio dependiendo de la plataforma donde lo compres, puede que en alguna encontremos promociones especiales, descuentos o gastos de envío gratuitos, por esta razón es importante comparar varias webs similares antes de adquirir el producto, eligiendo siempre la más beneficiosa. 

El reconocimiento. Además del precio, hay que fijarse atentamente en la calidad del producto, al llevar ya un tiempo en exposición puede tener roturas, taras o incluso contar con descuentos especiales por este motivo, por eso, es mejor asegurarse y en caso de encontrar algún desperfecto preguntar si dispone de rebajas por esta razón. 

Evita aglomeraciones. En este caso, además de por el coronavirus, evitar las horas punta y los lugares donde más personas acuden a comprar, permitirá que podamos encontrar más opciones con descuentos, analizar si debemos comprarlo con más detenimiento y adquirir productos de mayor calidad ya que se podrá ver en detalle más tranquilamente.  

La tarjeta de crédito. Tenemos que ser conscientes que disponer de este tipo de pago en muchas ocasiones es perjudicial y va en contra del ahorro, incluso puede suponer gastar por encima de nuestras posibilidades y aplazar pagos en un momento en el que no podemos permitírnoslo, por ello es imprescindible que solo se use en casos muy concretos y con extremada precaución, pues sino puede llevarnos al endeudamiento y no conseguir nuestro propósito de ahorro. 

En Cobertis, disponemos de múltiples opciones para ayudarte con el ahorro, si estás interesado, no lo dudes y contáctanos, conseguiremos la mejor solución para mejorar tu economía.