Potenciar el talento de los trabajadores, identificar los puntos fuertes, alcanzar las metas marcadas … Estos son algunos de los objetivos del coaching empresarial. En los últimos años este método se ha convertido en una actividad clave en las corporaciones; pues consigue que las personas mejoren tan personal como laboralmente, haciendo crecer el rendimiento y beneficios de las empresas.

En opinión de Pilar Zarzuela, Directora de la empresa Adi Talento, experta en dirección y gestión de equipos comerciales, en Coach Ejecutivo individual y en equipos de mentoring comercial, el éxito del coaching empresarial es debido a que es una fórmula de desarrollo que empodera las personas y los equipos, que consigue resultados de forma eficiente y transformaciones que permanecen a lo largo del tiempo.

Pero, como se lleva a cabo? Pues, trabajando directamente sobre las personas, sobre el equipo humano, aplicando diferentes técnicas de motivación y aprendizaje. No es sólo importante el resultado de un grupo de trabajadores, sino la satisfacción del mismo.

Por lo tanto, se estudia el lugar y la personalidad de cada componente de un equipo empresarial y se le sitúa ante diferentes situaciones. De este modo, se puede llegar a detectar la capacidad de comunicación, de resistencia ante la presión, la empatía, las dotes de liderazgo, de trabajo en equipo, etc. También, se observan qué aspectos se pueden mejorar o en qué puntos se destaca más o menos y se trabaja sobre ello, para reforzar cualquier carencia o virtud.

El coaching mejora la productividad y eficiencia, gestión de conflictos y liderazgo personal

En cuanto a las competencias que se trabajan en los procesos de coaching ejecutivo básicamente son la productividad y eficiencia; la gestión de conflictos y el liderazgo personal. Como el coaching trabaja con la persona / equipo en su totalidad (cuerpo-mente-emociones), así como en sus creencias y valores, se aumenta el autoconocimiento, la autoconciencia de las reacciones que podemos tener ante situaciones de ‘posible estrés’ -riesgo laboral asociado a los temas psicosociales y se desarrollan habilidades para afrontar mejor y con menor impacto.

Ahora bien, hay una pieza clave para que todo funcione correctamente: el coach. Según Zarzuela: «El coach debe formarse adecuadamente y continuar formándose según el código deontológico del coaching. Siempre tiene que pensar en el desarrollo del coachee (bien sea una persona o un equipo) y utilizar una buena metodología de trabajo que garantice resultados y evolución «.

Otro aspecto importante para lograr unos buenos resultados, es definir de forma clara a donde queremos llegar. Tal como comenta Zarzuela: «En el caso del coaching aplicado a empresas se trabaja con objetivos SMART, es decir, son específicos medibles alcanzables y temporalizados -con una fecha límite-. Además, es imprescindible que sean «ecológicos», es decir, conseguir que dependan de la persona y / o el equipo, y que mantengan o aumenten el bienestar de todos -personas, equipos, entorns-, los que están afectados por la consecución de estos objetivos «.

Los beneficios del coaching empresarial ya los conocen la mayoría de directivos. Un ejemplo es una encuesta reciente que realizó la empresa BSW Inner Circle a 759 empresarios, en la que comprobó que «casi uno de cada seis de ellos recurre a algún ‘coach’ de negocios para que sus trabajadores sean más capaces profesionalmente «.

«Un objetivo sin plan de acción definido es un sueño»

En esta misma línea, Zarzuela añade: «El hecho de trabajar orientados a la consecución de objetivos definidos por los coachees, y establecer planes de acción, que son consensuados y revisados ​​continuamente, permiten mantener el foco en los objetivos. Los coaches solemos decir que un objetivo sin plan de acción definido es un sueño ‘. El coach impulsa para que vayan sucediendo las etapas e hitos de los planes «.

Aparte de optimizar el rendimiento y la productividad de una empresa, el coaching empresarial consigue crear un ambiente laboral más agradable. Esto, tal como remarca Pilar Zarzuela, es posible gracias a que este método ayuda a que los equipos identifiquen sus puntos fuertes y se apoyen en él para superar barreras o áreas de mejora que puedan estar impidiendo ser más eficientes en todos los sentidos . En este sentido, el ambiente laboral mejora porque ayuda a que se conozcan mucho mejor, tanto individual como colectivamente, y desde este conocimiento se impulsan. Sin duda, el feedback es una herramienta que ayuda a todos a mejorar. Cuando se consigue implantar en un equipo todo es más claro, fácil y agradable.

En definitiva, los estudios demuestran que las compañías que implementan el coaching como sistema de gestión y desarrollo de sus profesionales alcanzan mejores resultados de negocio y más rápidamente. Empresas de otros sectores como Google, Microsoft, etc., utilizan este sistema como modelo de liderazgo en sí mismo, todos conocemos sus buenos resultados.